El Rollo Del Neoliberalismo
07.08.2009 12:04
El Rollo Del Neoliberalismo
En la segunda mitad del Siglo XVIII un escocés profesor de filosofía moral llamado Adam Smith resultó inventándose la economía moderna.
Smith (1723-1790) se interesaba en la moral y, por ese camino, en los valores. Quiso explorar en una de las manifestaciones materiales del valor, la riqueza, y escribió Una indagación sobre la naturaleza y causa de la riqueza de las naciones, libro conocido popularmente como La riqueza de las naciones.
En tiempos de Smith, predominaba la idea de que la riqueza estaba en la tierra. Quienes creían esto eran conocidos como fisiócratas. Antes, los mercantilistas, habían dicho que la riqueza estaba en la acumulación de oro.
Pero en su obra, Smith funda la economía moderna con la idea de que el origen de la riqueza estaba en el trabajo. Los objetos se vuelven más valiosos y útiles para el hombre cuando, gracias al trabajo, se les conoce más y se les transforma.
Según Smith, los individuos obtienen su bienestar consiguiendo lo que les falta a cambio de lo que pueden producir con su trabajo.
Y se esfuerzan porque el producto de su trabajo sea el mejor posible para poderlo cambiar por mayor cantidad de lo que les hace falta.
De esta manera, mediante el intercambio del fruto del trabajo de cada cual, en un escenario llamado mercado, la búsqueda egoísta del bienestar de los individuos termina garantizando el bienestar de toda la sociedad.
él busca solo su propio beneficio, pero en este caso como en otros, una mano invisible lo conduce a promover un objetivo que no entraba en sus propósitos Al perseguir su propio interés, frecuentemente fomentará el de la sociedad mucho más eficazmente que si de hecho intentase fomentarlo. Nunca he visto muchas cosas buenas hechas por los que pretenden actuar en bien del pueblo.
Esa es la famosa frase de la mano invisible, expresión que sólo usa una vez en La riqueza de las naciones.
Ese convencimiento sobre las bondades sociales del mercado (cuando hay competencia y no monopolios, por supuesto) sin que el Gobierno intervenga en él, y su planteamiento en el sentido de que el Estado surge para proteger la propiedad son los fundamentos del liberalismo económico; del viejo liberalismo.
Tras la economía clásica vendrían neoclásicos, neomarxistas y neomalthusianos. Los primeros preocupados por la asignación eficiente de los recursos; los segundos, por la justa distribución de la riqueza, y los últimos, por las escalas de producción necesarias para satisfacer las necesidades de toda la población.
A continuación se esbozan varias ideas de los clásicos que hoy siguen siendo fundamentales.
Origen de la riqueza.
Valor-trabajo: Desde Smith hasta el alemán Carlos Marx (1818-1883), los economistas coincidieron en que el precio de una mercadería reflejaba el trabajo que costó producirla, incluyendo el trabajo acumulado también en las máquinas que luego intervinieron en la fabricación. Esa es la idea fundamental de la teoría del valor-trabajo.
Valor de uso y valor de cambio: Smith distinguió dos significados de la palabra valor: la utilidad de un objeto en particular o valor de uso, y el poder que tiene el objeto de comprar otros bienes, o valor de cambio.
Precio nominal y precio real: Para Smith, el precio real del valor de cambio de un bien era el trabajo necesario para producirlo, pero por las dificultades de medir el trabajo incorporado en una mercancía, el intercambio terminaba haciéndose a través de un precio nominal expresado en cantidades de oro u otros metales. Este precio nominal podía subir o bajar principalmente por la escasez o abundancia de los metales usados para fabricar dinero. Según Marx, la diferencia entre el precio real (la cantidad de trabajo) y el precio nominal (en dinero) reflejaba un robo, por parte de los dueños del capital, de la plusvalía, es decir del valor agregado por los trabajadores a las mercancías.
La riqueza y su distribución.
Salario es la parte que le corresponde al trabajador, al distribuirse la riqueza. Tiende a ser igual a la cantidad de dinero necesaria para subsistir.
Renta de la tierra es la parte que le corresponde al propietario de la tierra. El inglés David Ricardo (1772-1823) señala que es el dinero que le queda al terrateniente después de pagar los costos de producción. Como los precios de los productos agrícolas son iguales a lo que cuesta producirlos en la tierra más mala que se esté usando, los propietarios de tierras de mejor calidad son los únicos que gozan de renta.
Ganancia es la parte que le corresponde al capitalista. Según Smith, es igual a la mejor opción que se le presente a quien quiere invertir en un negocio.
Gente y trabajo.
El problema de la población: El inglés Thomas Malthus (1766-1834) advierte que mientras los medios de subsistencia crecen en progresión aritmética la población crece en progresión geométrica. Por lo tanto, el crecimiento económico no puede satisfacer las necesidades de la población.
Ley de hierro de los salarios: Smith y Ricardo pensaban que si los salarios suben por encima del nivel que garantiza la subsistencia y la descendencia, se reducirá la mortalidad infantil y, por lo tanto, aumentará la población y el número de trabajadores. Como hay más oferta de mano de obra, los salarios regresarán hacia su nivel natural (de subsistencia), aumentará de nuevo la mortalidad infantil y la población bajará de nuevo. Así, contrario al crecimiento indefinido de la población que veía Malthus, Smith y Ricardo pensaban que los salarios terminaban controlando la población.
Ejército de desempleados: Marx interpreta la relación entre el tamaño de la población y el nivel de los salarios como la forma en que los capitalistas y terratenientes cuentan con un ejército de reserva de desempleados que les permite, por el exceso de mano de obra, que los salarios se fijen en un nivel de subsistencia y, de esta manera, las ganancias vayan a manos de los dueños del capital y de la tierra, y no a las de los trabajadores.
Crisis del capitalismo.
Según David Ricardo, la población podía seguir aumentando mientras hubiera nuevas tierras disponibles, cada vez de menor calidad. Pero al no haber más tierras, una producción relativamente más escasa haría subir los precios. Los salarios también aumentarían, para conservar su nivel de subsistencia y bajarían las ganancias de los capitalistas. Así, no se puede acumular más capital y como los salarios llegan a un tope la población no crece más. La economía llega a un estado estacionario. Se estanca.
Demasiado impulso.
Para Marx, la caída de las ganancias se origina porque la acumulación de capital se impulsa demasiado, al punto que se le da empleo a todo elejército de reservai y los salarios suben haciendo caer las ganancias. En ese momento la inversión se interrumpe porque deja de ser rentable.
Ventajas comparativas.
Ricardo sugiere que para evitar el aumento del precio de los productos y de los salarios, que llevan al estancamiento y la crisis, se debe permitir el libre comercio entre países, para que en cada país se puedan comprar más baratas las mercancías que se producen a bajos costos en otras partes. Así, cada país debe hacer uso de sus ventajas comparativas, es decir, de la posibilidad de producir y exportar aquellas mercancías que puede ofrecer a costos más bajos que los otros países.
Publicación: eltiempo.com
Sección: Otros
Fecha de publicación: 28 de marzo de 2001
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